Páginas vistas por los Aprendices

21 sept 2015

Cómo NO promocionar tu libro en redes sociales



Querido viajero,

¿Cómo va tu aventura? ¿Has descubierto ya una nueva idea o has creado un personaje genial con el que engancharás al lector? ¡Seguro que sí!

Tenía muchas ganas de "tocar" el tema de hoy ya que, desde hace bastantes meses, llevo analizando el comportamiento de los escritores (especialmente los independientes) en redes sociales. Debo reconocer que me he quedado un poco sorprendida...

Las redes sociales son un gran escaparate si sabes cómo usarlas.
Es absolutamente normal que, cuando terminas tu libro, tengas muchas ganas de venderlo (y venderte a ti mismo como el escritor del año. El ego siempre estará ahí)... ¡pero no querrás que te consideren un pesado y te tengan como escritor spam!

En las redes sociales no sólo se trata de venderte, sino de interactuar con las personas, ofrecerles contenido interesante y aprender los unos de los otros. ¡Al menos esa es mi visión! Por ello nació este blog y gracias a otros bloggers he aprendido muchas cosas sobre literatura y redacción.

Ahora veamos, según mi criterio, cuáles son los errores más comunes que he detectado:

Facebook:

Hace unos meses, con toda la ilusión del mundo, quise crear un grupo para amantes de los libros scifi. Tenía la esperanza de que el grupo fuese muy activo, que hubiese debates, historias, recomendaciones (ilusa de mí... ). Al principio lo alimentaba con libros recomendados, frases célebres, imágenes, etc... pero pronto vi que la mayoría de integrantes terminaban por publicitar masivamente sus libros... ni un "hola" y escasas interacciones... El grupo se llama "Fantasy and Scifi Books", podéis comprobarlo.
A mi este tipo de spam me provoca rechazo, pero quizá haya a quien le guste recibir ese aluvión informativo. 

Twitter:

Esta es la red social que más me gusta, lo reconozco. Lo tengo todo etiquetado en listas (escritores, editoriales, temas de humor, noticias, etc), publico con frecuencia y los errores que más me han llamado la atención son los siguientes:
  • Twits de calidad. Igual que en cualquier red social, mi consejo es que intentes esforzarte por publicar contenido de calidad, no sólo intentes vender tu libro. Esto marcará la diferencia entre escritor polifacético que genera interés o el pesado al que pongo en spam porque me inunda el timeline con la portada de su libro. 
  • Utilizar el DM (mensajes directos) para enviar publicidad. Odio estos mensajes. ¿Por qué no pruebas con un "hola, gracias por tu follow" o eres un poco más creativo? No hace falta que programes los mensajes de bienvenida a menos que seas Ane Rice y te lleguen setenta mil cada día... Si te sigo es porque hay algo de ti que me ha interesado, deja que te descubran por lo que haces. Mantén tu cuenta interesante, con cosas que aporten valor y el resto vendrá solo. 
  • Programar todas tus publicaciones. Si lo programas todo para que salga automático, ¿cuándo hablas con la gente?
  • Vida privada en twitter. Si quieres explicar tu día a día bien, pero ten en cuenta que saber lo que has comido hoy, no me hará tener ganas de comprar tu libro o saber más sobre ti. Explica algo interesante, abre un blog y comparte tu sabiduría con otros. Eso siempre gusta ^^
  • Número de followers y unfollows. Hay quienes están constantemente mirando (con la consiguiente publicación automática) del número de seguidores, los que le han hecho unfollow... vamos a ver, diviértete con lo que haces y no te preocupes de la cantidad de seguidores, sino de la calidad de los mismos.
  • Nombrar a alguien famoso o influencer sin motivo. No sólo no te harán caso, sino que te juegas a que te empiecen a bloquear... Es mejor citarlos con algún tema de calidad que pueda generarle interés y, con suerte, te hará RT (retuit) o marcará tu tuit como favorito (FAV).

Instagram:

Si realmente te interesa vender en esta red, tienes dos opciones: hacerla personal y/o enfocarla al tema literario. Puedes mezclar imágenes de tu vida, lugares que visitas, etc, con tus libros preferidos, frases literarias, etc. Mientras no inundes tu cuenta con cientos de fotos de comida o de tus pies en la playa todo irá bien. Personalmente me gusta Instagram, aunque reconozco que no lo uso con fines literarios :p

Si cuelgas fotos de tu libro, recuerda que aquí, a diferencia del resto de redes, puedes usar las etiquetas tanto como quieras. De hecho es la forma en la que más éxito tendrás para que otros usuarios te encuentren. Puedes usar hashtag populares como #instabook #instalike o #instaquotes para sumar visualizaciones (y seguidores). No olvides que puedes hacer concursos o algo que motive a la gente a interactuar. ¿Ves? Volvemos a sacar como conclusión que no es necesario inundar la red con la portada de tu libro. Es un proceso lento, pero verás recompensas a medio y largo plazo. 

Próximamente hablaré en el blog sobre otras redes sociales: Pinterest, LinkedIn o incluso el canal Youtube.

¡Vuelve a visitar La Taberna cuando quieras! Pide tu bebida preferida, relájate en nuestros cómodos sofás y déjate llevar por la magia del mundo literario, ya sea escribiendo o leyendo.






17 abr 2015

Cuando terminas tu primera novela


Querido viajero,

Hace tiempo que no nos vemos, ¡espero que todo vaya bien! Toma asiento, acomódate. Ya sabes que esta taberna es tu casa.

Como ya he comentado alguna vez, todo lo que redacto en este blog es fruto de mi aprendizaje, del día a día del escritor novel. Poco a poco vamos siendo una verdadera Orden de Aprendices, un lugar donde compartimos experiencias y exponemos dudas (algunos posts del blog los he escrito gracias a dudas que me habéis enviado por e-mail). 

Muchos de los Aprendices han terminado su libro, quizá se encuentren escribiendo, incluso, un tercero o cuarto. Aun así la mayoría somos noveles, con todas las letras. Por eso quiero compartir contigo mi experiencia al terminar (al fin) ese primer libro. En realidad lo llamo "fin de la fase 1" y ahora entenderás el por qué. 

Cuando terminas tu primer libro es realmente especial (qué sorpresa, ¿verdad?). Es una mezcla entre incredulidad y excitación; piensas muchas cosas, sobretodo pierdes un poco de vista el presente y pones el foco en el futuro (publicar, editar, maquetar, portada, etc). Supongo que es normal. Aún así, he intentado frenar un poco todo eso para seguir centrada en el protagonista de todo esto, que no es otro que el libro. Sé que es difícil, pero cuando termines de escribir intenta relajarte y pensar con claridad. No tengas prisa, sería una pena echar por la borda un proyecto por tener prisa por terminarlo, ¿no crees?

No lo leas durante un tiempo, déjalo reposar (hazme caso). A algunas personas con unos días les basta, otros necesitan más tiempo para "resetear" y retomar la lectura del libro con un rol lo más objetivo posible. 

Cuando retomes tu libro después de ese pequeño descanso, entrarás en la "fase 2" en la que pronto me adentraré (y así te podré contar más cosas). En estos momentos podéis dejar leer la historia a alguien muy muy allegado para que os dé su opinión. Yo, por ejemplo, se lo he enviado a uno de mis mejores amigos, Xavier Prat, a quien pertenece el blog "El Barco de los Malditos". Recuerda no enviarlo a nadie que no sea de tu máxima confianza (al menos en esta fase, ya que no está registrado). 

La fase 2, como te comentaba, querido aventurero, se tratará de leer el libro, de principio a fin y ver que el argumento y subtramas cuadren. Si me has estado haciendo caso y has planificado tu historia, seguro que te será muy sencillo repasar que todo esté donde tiene que estar. Luego, por supuesto, vendrán las correcciones ortotipográficas y de estilo pero antes de este paso, y especialmente si lo vas a enviar a correctores profesionales, recuerda que tienes que registrar tu novela. En el post "Corrector de pruebas vs corrector de estilo" tienes unas pistas sobre la importancia de esta figura. 

Espero que esta entrada te haya servido. No es tan didáctica como otras, pero es otro paso más que todo el escritor tiene que dar y que pocos explican (a veces parece que solo con terminar un libro ya se publique como arte de magia). ¡La paciencia es una virtud, querido amigo!






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